“Con el apoyo del movimiento sindical, resistimos, luchamos para impedir la perdida de los derechos y derrotamos al neoliberalismo y a las pretensiones del ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas). Ahora, es hora de avanzar en la universalización de los derechos”, defendió el Ministro, enfatizando el papel indispensable de los movimientos sociales en el período de ofensiva que se avecina.

En referencia la campaña “El Petróleo es Nuestro”, de la década del 50, Luiz Dulci recordó que Brasil tiene una larga tradición de protagonismo político de sus entidades populares, que se hacen cada vez más presentes para presionar por la profundización de los cambios. De acuerdo con el Ministro, las movilizaciones “fueron, son y serán fundamentales” en el combate a la reacción conservadora, que ve en una mayor democratización de la sociedad una amenaza para sus privilegios.

Según el Secretario General de la Presidencia, el establecimiento de una nueva relación del Estado con la sociedad fue decisiva para que Brasil enfrentase y superase la crisis sufrida desde los países centrales del capitalismo. “Aquí, los principales órganos de prensa, sus economistas, articulistas y formadores de opinión defendían que el Gobierno aplicase aquella terapia clásica del FMI y aceptase la recesión. Al final, en crisis análogas, el camino era siempre elevar intereses, reducir inversiones, apretar salarios y disminuir el consumo, deprimir la economía hasta que el capitalismo internacional tuviese un nuevo ciclo de crecimiento. Ante el comportamiento del presidente Lula de negociar con el movimiento sindical otro camino, la derecha decía que era una irresponsabilidad, una insensatez, una locura. ¿Como pensar en mantener el desarrollo si el mundo estaba en recesión? En el auge de la crisis, el Gobierno hizo dos reuniones con el movimiento sindical, no solo para debatir salario y empleo, sino para discutir la política macroeconómica, como fue con los empresarios. Y haremos de todo para mantener el crédito y la inversión productiva”, enfatizó Dulci.

En la visión del Ministro, el escenario electoral que se avecina, de intensa disputa ideológica contra los conservadores, más que nunca es imprescindible la participación de los sindicalistas, para corregir los errores, consolidar los aciertos y seguir al frente. “La mejor manera de preservar las conquistas es avanzar”, subrayó.

El secretario de Relaciones Internacionales de la CUT, João Antonio Felício, agradeció la participación del Ministro y recordó la postura firme y altiva de Dulci en solidaridad con Cuba contra la campaña de difamación patrocinada por el imperialismo, de defensa del cierre de la prisión de Guantánamo, de apoyo a la causa palestina, e su actuación contra los golpes en Venezuela e en Honduras, entre otras importantes demostraciones de compromiso con la causa de la libertad de los pueblos.