En la concentración estaban presentes los trabajadores choferes de EDESUR, los dirigentes de la CTA Capital, Carlos Chile, secretario Adjunto, Eduardo Otero y Julio Macera; Daniel Jorajuría, miembro de la Mesa Nacional de la Central; y José Luis Matassa, Gabriel Martínez y Ana Sacchi de la Federación de Trabajadores de la Energía de la República Argentina (FeTERA-CTA), sumado con ellos trabajadores gastronómicos, ex trabajadores de YPF, visitadores médicos y delegaciones de distintas organizaciones gremiales que acompañaban a los dirigentes del área de choferes de la empresa.

Luego de casi una hora de discusión, se estableció un cuarto intermedio de 48 horas donde la representación de EDESUR se comprometió a dar una respuesta con respecto a la decisión de reingresar al trabajo a los 19 trabajadores despedidos.

Los trabajadores echados tienen más de veinte años de antigüedad en la empresa y hace menos de un año se constituyeron en agrupación y se integraron a la FeTERA-CTA, que convocó a elección de delegados en el sector y logró una notable participación de trabajadores, que por primera vez en veinte años, tenían la posibilidad de organizarse y elegir delegados.

EDESUR, atribuyéndose un derecho que no le dan las leyes, desconoció esta elección y procedió a echar al delegado Raúl Acosta, en marzo pasado. Este fin de semana, avanzó aún más, y dejó sin trabajo a toda la conducción de ASTTAASE, encabezada por su secretario General Daniel Correa.

La actitud de EDESUR, absolutamente desafiante, se produce apenas a veinte días de la visita a la Argentina de la comisión de expertos de la OIT, que cuestionó la restrictiva ley de unicato sindical y que contó a los dirigentes de los choferes de EDESUR en ASTTAASE, como activos participantes de los actos donde se denunció la falta de libertad sindical en el país.

La agrupación ASTTAASE viene denunciando públicamente el fraude laboral que comete EDESUR, al desconocer mediante artilugios legales, a trabajadores que deberían integrar la planta permanente de la empresa.

Esta situación, totalmente irregular ha generado preocupación en la Cámara de Diputados de la Nación, y también en la de la provincia de Buenos Aires, donde varios legisladores han reclamado informes, al tiempo que expresaban su solidaridad con los trabajadores explotados.