La Asociación Trabajadores del Estado (ATE-CTA) de Corrientes puso de manifiesto su descontento en la manera en que el gobierno se aviene a dar los aumentos salariales y reclama un a convocatoria a la Mesa de Relaciones Laborales que existe en la provincia.

ATE acusa que el Gobierno equivoca el camino porque hay una visión parcializada de lo que se otorga y lo que necesitan los trabajadores. Lo que se entiende es que en definitiva el gobierno llega a soluciones de corto plazo y no mira el objetivo central que es ganarle a la inflación, que a esta altura del año ya muchos especialistas pronostican que llegará al año con un índice superior al 35%.

El gremio sostiene que para equiparar al menos este desfasaje el sueldo mínimo debería ser de 2.500 pesos, que es el valor de la canasta familiar. Esto choca con los 1.600 pesos, que ha definido el gobierno.

Estas resoluciones inconsultas vienen siendo moneda corriente desde que se instaló el gobierno de Colombi y que han generado más de un malestar entre los trabajadores. Por ejemplo es reciente la anulación de los decretos de pase a planta permanente y quita de recategorizaciones, que ATE acordó con la anterior administración y que hoy enfrenta un proceso de judicialización.

Respecto a los pases a planta del personal temporal hay definiciones concretas de la Justicia de que los trabajadores han ganado legítimamente su ingreso al Estado. De hecho esta misma semana hay una resolución judicial para que 10 trabajadores de la salud que cumplen fundones en la ciudad de Mercedes sean reincorporados. Hay también una promesa del gobierno de aceptar reincorporar a otros 19 trabajadores en el mismo lugar.

Respecto a las cesantías esta semana ATE iniciará una serie de acciones para recuperar los puestos perdidos entre los porteros de escuelas provinciales.

Fuente: www.ateargentina.org.ar