A diferencia de los intentos fallidos anteriores —tanto el de hace dos semanas, que una asamblea de trabajadores rechazó, como el borrador del último viernes que finalmente la compañía no aceptó y rehusó firmar— ahora se especifica la situación de los obreros suspendidos: serán unos 600, tendrán esa condición en carácter rotativo durante seis meses, y luego pasarán a suspensiones permanentes por otros seis, totalizando un año. Luego de ese plazo, se desvincularán de la empresa.

En los demás aspectos, el convenio no difiere en lo sustancial del que en un par de oportunidades pareció alcanzarse, y luego se frustró: los trabajadores podrán optar por el retiro voluntario cobrando indemnizaciones al ciento por ciento —hasta el año—, mientras que unos 300 trabajadores —de un total de 900— permanecerán activos y con salarios similares al de otros empleados metalúrgicos en actividad. Los suspendidos, a su vez, cobrarán una cifra aportada sustancialmente por el gobierno nacional cercana a los dos mil pesos más asignaciones familiares.

Si bien ayer prevaleció un total hermetismo de todas las partes, ya curadas de espanto en anunciar acuerdos que luego se caen, LaCapital pudo saber que esta vez el empresario Cristóbal López se allanará al acuerdo, y no rechazaría a último momento los términos de un convenio tan complejo y trabado, como sucedió la semana anterior. "En estas condiciones, entramos al acuerdo", manifestó una fuente desde las oficinas de Cristóbal López en Buenos Aires.

De todos modos, recién hoy —se presume a las 15, aunque podría ser antes— se sabrá si el convenio se rubrica o no en el Ministerio de Trabajo. Y en la hipótesis más positiva, recién entonces partirá la delegación de representantes gremiales a buscar la ratificación en Villa Constitución, y de esta manera se daría por terminado el piquete que mantienen en la ruta por 28 días.

La noticia fue tomada con optimismo, pero también con cautela en la autopista Rosario-Buenos Aires, donde los operarios mantenían ayer el piquete. No obstante los trabajadores liberaron el paso por la ruta 21 y 90 y flexibilizaron el tránsito por las colectoras.

Cautela en la Autopista

"Optimistas, pero con cautela". Así definió el tesorero de la UOM villense, Carlos Vázquez, el estado de ánimo imperante entre los trabajadores de Paraná Metal que sostienen el corte de la autopista Rosario-Buenos Aires, a raíz de los avances que se habrían registrado durante la reunión realizada ayer en la sede del Ministerio de Trabajo de la Nación entre las más altas autoridades nacionales y provinciales del área, los dirigentes nacionales y villenses de la UOM, miembros de la comisión interna y representantes de la empresa.

"Sólo podríamos estar optimistas del todo si a los representantes de la empresa los ataran a la pata de la mesa para que no se vayan", dijo Vázquez desde la autopista a primeras horas de la noche de ayer, mientras en Buenos Aires, según indicó, se seguía discutiendo todo punto por punto y apostando a que lo que se acuerde se extienda a un año.

El sindicalista informó además que la respuesta definitiva de los obreros a la propuesta que traerían los dirigentes desde la Capital Federal saldrá de la asamblea que realizarán los trabajadores hoy a la tarde o mañana.

Asimismo, el tesorero de la UOM villense manifestó, respecto de los cortes de ruta, que los trabajadores liberaron el paso por las rutas provinciales 21 y 90 y que, al momento del diálogo con LaCapital el paso desde y hacia Buenos Aires estaba habilitado por las colectoras.

También indicó el dirigente sindical que, salvo algún hecho aislado, los huelguistas han cosechado un cierto rechazo por la medida adoptada que se expresa "de buena manera". Asimismo indicó que mayormente los camioneros y automovilistas hacen sonar sus bocinas en manifestación de apoyo al piquete metalúrgico.

Fuente: Diario La Capital de Rosario