"En pleno siglo XXI, las persecuciones y el sometimiento siguen siendo las formas que utilizan algunos patrones para que los trabajadores agachen la cabeza y se olviden que tienen derechos", denunció hoy la CTA rionegrina ya que en Cipolletti, trabajadores que luchan contra la precarización laboral, son perseguidos y despedidos arbitrariamente.

"Juan Aedo y Diego Aguirre, fueron víctimas del abuso de poder ejercido por la empresa de seguridad privada, Vigilancias y Seguridad SA, perteneciente al Grupo Securitas que presta servicios en todo el país y que a nivel mundial, dice tener, como primer mandamiento el respeto a los derechos humanos. Quién se jacta de ejercer respeto es quien comete la mayor falta: primero con traslados arbitrarios y luego con el despido arbitrario".

El comunicado, que lleva la firma del secretario general Luis Giannini y la de Derechos Humanos, Marta Vidal, denunció que hoy los directivos de la empresa "consideran peligrosos a los trabajadores que hacen uso de sus derechos, como el de libertad sindical, para organizarse, fundar sindicatos y asociarse en ellos para la defensa de sus intereses".

La Central exigió "justicia", repudió "las prácticas antisindicales ejercidas por la patronal", al tiempo que expresó que "apoya profundamente a los trabajadores de vigilancia privada, que han organizado en la provincia de Rio Negro, sobre las bases de la CTA, el Sitrasep, un sindicato que se compromete, no solo a representar a los trabajadores, sino a defenderlos y hacer eco de sus reclamos, haciéndole frente al poder arbitrario de los patrones".