La ceremonia que tuvo como presentador al preceptor José Luis Bugarín Díaz comenzó con la interpretación del tema de Sui Generis, “Rasguña las Piedras”, por parte del Taller de Música a cargo del Profesor del Colegio, Eduardo Marega. Visiblemente conmovidas la rectora del Rivadavia, profesora Ana Grandinetti, y las dos Vicerrectoras Marta Iruarrizaga y Marta Fernández dieron la bienvenida e invitaron a los asistentes a entonar el himno nacional. En las últimas estrofas de la canción magna muchos de los presentes levantaron sus manos con los dedos en “V”, que evidenciaba la pertenencia (por lo menos ideológica) a la “tendencia” peronista de los años ´ 70. Sin dudas la mayoría de los homenajeados militaron o adherían a sectores vinculados con el peronismo revolucionario.

“Como no voy a estar orgulloso de mi hijo y de su lucha” dijo un emocionado Julio Morresi, padre de Norberto, alumno secuestrado y asesinado el mismo día de su detención (23 de abril de 1976). Relató casi balbuceando de la emoción las tareas de ayuda solidaria que realizaba su hijo junto a otro grupo de jóvenes en las villas de emergencia, en las cuales colaboraba en cursos de alfabetización.

El colegio Otto Krause dijo presente con un grupo de estudiantes que expusieron a lo largo del acto pancartas con los rostros de los alumnos desaparecidos en esa institución. Sin dudas el homenaje del “Rivadavia” promete extenderse a otros colegios; en ese sentido el 14 de octubre de 2011 a las 11:00 hs se realizará en el Krause un acto similar.

A continuación la profesora María Cipoletti mencionó a todos los integrantes de la institución desaparecidos durante la dictadura, escuchándose a continuación de cada nombre, la palabra “Presente”, pronunciada con vehemencia por los familiares y por todo el Colegio.

Inmediatamente alumnos del “Rivadavia” ofrecieron unas palabras y opinión sobre lo sucedido en aquellos años. Una de las docentes comenzó su discurso mostrando un libro escrito por el Juan Domingo Perón: “Palabras a los filósofos-La comunidad organizada”, libroque había sido regalado por una alumna a un compañero de militancia. Este compañero, enterándose tiempo después de la desaparición, recordó aquel libro, guardado en su biblioteca que buscaba regresar. Durante la ceremonia se lo hicieron llegar a los familiares de la muchacha

“Recuerdo las normas absurdas que regían en el colegio”, rememoró el primer presidente del centro de estudiantes de la institución en 1981. Hubo también una obra de teatro interpretada por alumnos del colegio, la cual fue programada a último momento, más precisamente el viernes anterior al acto. El profesor de teatro del colegio, quien propuso si querían pensar una presentación corta sobre el tema y sus alumnos enseguida pusieron manos a la obra. El libreto, genialmente interpretado por los estudiantes, no ahorró emociones. Una alumna entró al patio vestida de militar seguida de varios chicos con sus cabezas tapadas con bolsas de nylon negras, formando formaron en circulo. La chica preguntaba a cada uno que quería para su país, y cada uno contestaba:.. “libertad....justicia....paz..... llegando hasta el último joven que dijo..."yo quiero que gente como vos se muera”. Entonces la alumna que emulaba a personal del ejército, con su mano en forma de arma, disparaba a cada uno de los alumnos encapuchados. Cuando termina se retira del lugar y los chicos comienzan a levantarse, a sacarse la capucha y a tirarla al piso, pateándola.

El diputado nacional Dante Gullo (FPV) recordó a su hermano, preceptor desaparecido. Foto: Guadalupe Cecconi para AM.

El Diputado Nacional Dante Gullo, hermano de Jorge, preceptor desaparecido, también dirigió unas palabras y agradeció por la placa homenaje, adornada con una rosa roja, en la puerta de la preceptoría del “Rivadavia”.

Luego se cantó el tema “La Memoria”, de León Gieco. Sin dudas fue uno de los momentos más conmovedores del acto, ya que casi todos los presentes se emocionaron hasta las lágrimas.

Se descubrieron placas recordatorias, situadas en cada aula, llevando el nombre y la fecha de cada detenido-desaparecido, hasta llegar a la placa final, situada en el hall principal del colegio, con el nombre de todos y cada un de ellos. Tapadas con telas blancas y cintas argentinas, una a una fueron descubiertas por familiares, mostrando sus nombres y la emoción de recordarlos y tenerlos con nosotros para siempre. Los familiares de Eduardo Franconetti (ver detalle más abajo) al descubrir la placa colocaron sus manos sobre ella, un largo rato, muy emocionados. La última placa que se descubrió fue la del hall central y al finalizar, los familiares, nuevamente como al cantar en himno nacional, gritaron tres veces la palabra “Presente”.

En un costado del Hall de entradas se realizó una muestra con muchísimas fotos, de la época del proceso. Los responsables de “Nuestro archivo” sectorizaron las imágenes teniendo en cuenta los años, destacando sobre todo la tarea realizada por los familiares de detenidos-desaparecidos.

Como afirma Gustavo Leiva, docente del “Rivadavia”, el “27 afirmamos y confirmamos, que el espíritu de lucha sigue recorriendo los pasillos, las paredes y los patios... y sigue contagiando a los pibes que desde hace décadas intentan acallar”

Familiares, compañeros, Madres de Plaza de Mayo, alumnos y docentes se comprometieron y juraron con su presencia “No Olvidar” y lo hicieron de la forma más honesta y clara…con la memoria.

Fuente: Portal de la Organización Alerta Militante.