En cuanto a los conflictos laborales, destacamos que durante el segundo trimestre de este año registramos 128 casos, cantidad que es similar a la relevada en el mismo trimestre del año anterior. La mayoría de los conflictos (un 75% del total) se desarrollan en el ámbito de una empresa, y son promovidos mayoritariamente por sindicatos de base o seccionales (un 61% del total).

Aún así, en este trimestre se verifica una importante presencia de los conflictos centralizados (de ámbito nacional, y promovidos por federaciones o uniones nacionales), vinculados principalmente a la renovación de los acuerdos salariales. Asimismo, se destaca la fuerte incidencia que tienen los conflictos de representación (prácticas antisindicales, encuadramiento, negativa a negociar), que se encuentran presentes en casi uno de cada cuatro conflictos.

Con relación a la negociación colectiva, los acuerdos y convenios colectivos de trabajo homologados por el Ministerio de Trabajo de la Nación durante el segundo trimestre de 2010 comienzan a reflejar los resultados de la renovación de los acuerdos salariales (aunque ellos se registrarán, mayoritariamente, en los próximos informes trimestrales).

En particular, se destaca que el 64% de las homologaciones contiene algún tipo de recomposición salarial, y un incremento de la propoción de negociaciones por actividad o rama (42% del total, frente a un 35% del total en el mismo trimestre del año anterior). Por otra parte, persiste un significativo incumplimiento de la obligación de garantizar la presencia de los delegados en las negociaciones colectivas a nivel de empresa: en el 55% de los casos, dichas negociaciones se han llevado adelante sin la participación de los representantes de los trabajadores en los lugares de trabajo.

Conflictividad laboral

En el segundo trimestre de 2010 se registraron 128 conflictos laborales cifra que resulta similar a la relevada en el mismo período del año anterior. De ellos, el 81% corresponden a la actividad privada y el 19% al ámbito público.

El 75% de los conflictos se desarrollaron a nivel de empresa, mientras que el 25% restante fue a nivel de rama, actividad o región.

El 61% de los conflictos son protagonizados por sindicatos locales o seccionales, el 27% por federaciones, uniones o sindicatos nacionales y el 12% de los conflictos son protagonizados por trabajadores sin representación sindical o en conflictos con las mismas.

La mayor cantidad de conflictos tuvieron lugar en Capital Federal y Buenos Aires (27%), seguidos por los conflictos que abarcaron a la totalidad del país (16%), estos últimos ligados a la renovación de los acuerdos salariales.

Las actividades donde se registraron mayor cantidad de conflictos son la industria manufacturera (23%) y el transporte, almacenamiento y comunicaciones (23%), seguidos por la educación (7%), la administración pública (7%) y la electricidad, gas y agua (7%).

Los reclamos por reivindicaciones económicas (aumentos de los básicos o adicionales) se encuentran presentes en el 45% de los conflictos, en tanto las situaciones de crisis o imposición de cláusulas de flexibilidad están en el 41% de los casos registrados. Por su parte, los conflictos de representación (prácticas antisindicales, encuadramiento, etc) representan el 22% de los casos relevados.

Negociación colectiva

Durante el primer trimestre del año el Ministerio de Trabajo homologó 445 negociaciones colectivas, un 21% más que en el mismo período del año anterior, de las cuales el 95% corresponden a acuerdos y el 5% a convenios colectivos. Del total, el 58% corresponden a negociaciones de empresa y el 42% a negociaciones por actividad o rama, lo que implica un incremento significativo de las negociaciones por actividad (35% el mismo trimestre del año anterior).

Considerando sólo los convenios colectivos, el 54% corresponden a nuevas unidades negociales, el 42% son renovaciones de convenios anteriores y el 4% restante son articulados a convenios de ámbito superior.

Las federaciones y los sindicatos nacionales o uniones protagonizaron el 73% de las negociaciones, y en el 56% de los casos lo hicieron sin participación de estructuras inferiores.

Las actividades más activas en materia negocial han sido la industria manufacturera (35%), el transporte, almacenamiento y comunicaciones (22%), y otras actividades de servicios sociales, comunitarios y personales (12%).

El 55% de las negociaciones por empresa no contaron con la participación de los delegados de personal tal como lo establece la ley 25877.

El 64% de las negociaciones incluyeron alguna mejora salarial permanente, ya sea por actualización de escalas, otorgamiento de adicionales remuneratorios o por vía de sumas no remunerativas, lo que implica un incremento de ocho puntos porcentuales respecto del mismo período del año anterior.

El promedio de los salarios básicos inferiores es de $ 2.316, lo que representa un aumento del 24% con relación a las escalas homologadas en el mismo período del año anterior, en tanto el de los básicos superiores alcanza a $ 3.771, lo que representa un 22% de aumento interanual.

En cuanto a los contenidos no salariales, las principales cláusulas negociadas son de aportes y contribuciones a la organización sindical, presentes en el 20% de las negociaciones homologadas, y el ordenamiento de las relaciones laborales, presentes en el 11% del total.