Además, dijo que "no podemos aceptar de buena manera" el incremento salarial del 10% cuando "no se tiene perspectiva" sobre cómo evolucionará el costo de vida.

Almirón dijo que "si bien es cierto que la suma fija viene a paliar un poco las necesidades que tienen los compañeros, no se condice con el espíritu del reclamo que se viene llevando adelante", teniendo en cuenta que "el Gobierno se había comprometido en el último acta acuerdo que firmamos en abril, que en junio nos íbamos a sentar a discutir la pauta salarial para el segundo semestre del año, y hasta hace una semana venía diciendo que no tenían plata y estaban en déficit". "Pero de un momento para el otro, cuando tanto en Ushuaia como en Río Grande los compañeros iniciaban medidas de protesta, de la galera sacaron alrededor de 15 millones de pesos para el monto fijo, cuando podríamos habernos sentado a discutir cómo incluir ese mismo monto en un aumento salarial, y discutir la pauta para 2011", cuestionó.

Asimismo, enfatizó que "un 10% de aumento para 2011 no teniendo en perspectiva cuál sería el porcentaje del costo de vida, nosotros no podemos aceptarlo de buena manera", y evaluó que "lo que se van a llevar al bolsillo los funcionarios con este aumento salarial es mucho más que lo que van a recibir los compañeros". Para Almirón "siempre es mejor llevar plata al básico, por más que sean 30 pesos, ya que eso queda incorporado definitivamente y no se puede modificar", en cambio "los 700 es pan para hoy y hambre para mañana".

Finamente, el referente de ATE fustigó que "el Gobierno está actuando en forma anti sindical", porque "en medio de una medida de fuerza en reclamo de una recomposición salarial saca estos 700 pesos con la idea de que los compañeros van a comprar el buzón".

Fuente: ANB